Home

Hace tiempo que dejé de escribir. Han pasado dos, o incluso seis meses desde la última vez que me senté en frente de esta pantalla a escribir. Ni lo sé ni me importa. Me es indiferente. Quizás ese sea el motivo por el cual he dejado de escribir. O puede que esa etapa de mi vida haya decidido desaparecer.

Muchos opinan que escribir es la mejor manera de desahogarse. ¿Pero desahogarse de qué? Quizás ya no tenga nada sobre lo que desahogarme. Nada que comunicar. Nada que sentir. No sé si alegrarme porque ya no tengo nada sobre lo que escribir o entristecerme porque mis sentimientos ya no necesitan gritar. Quizás me he vuelto inmune a la sociedad. Ojalá. Cada día me da más asco, ya sabes, todo esto. A medida que van pasando los días me voy dando cuenta de lo poco que necesito para sobrevivir, y creedme que es sentimiento un tanto extraño.

Últimamente no pienso en nada. Olvido todo.

Creo que por primera vez en toda mi vida, soy feliz.

9691969794_d26dc7cd51_b

Deja un comentario